Siempre he creído que Papa Noel entraba en las casas de una forma mágica,su trineo aterrizaba en vertical como los aviones de combate de ultima generación,pero no,ahora resulta que trepa con una soga como un delincuente del este en una urbanizacion de Casteldefels.Los iconos navideños suelen ser un pelin horteras pero esta plaga que inunda nuestras fachadas se lleva la palma.Para colmo no solo no lleva el popular saco de los regalos sino que se cuela en tu hogar con una mochila vacía,que parece que venga a llevarse en vez de traer.He encontrado a parte de los culpables,se venden como churros en un mercado de artículos navideños en la Plaza Mayor de Madrid,pero porque conformarse solo con la época de navidad,porque no fabricar otros muñecos para el resto del año,bomberos,alpinistas y lo que seria una bomba,recuperar el muñeco de Elvis, versión fachada,para que el rey mueva su pelvis al son que marque el Cierzo ,la Tramontana o el Levante.
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