LA MATRIMONIADA

No era sábado por la noche, ni estabamos en la primera cadena. Tampoco estaban Quique Camoiras ni Lina Morgan, ni Juanito Navarro. Ni siquiera todo lo que aconteció fue dirigido y presentado por José Luis Moreno, pero el matrimonio que se subió al taxi parecía sacado de un gag de Noche de Fiesta.
Acurrucados en los asientos traseros, comenzaron a transformarse en el espejo en dos personajes de matrimoniada sórdida, en la que una vez más la señora era el gordo y el marido era el flaco.
- CHATÉ más allá , que vas aquí en TO el medio, ¿ las dicho al del TASIS ande vamos ? , al hospital, si es que...has cogío la RAYOGRAFÍA...
El hombre con cara de susto, balbucea:
-los dientes , me CACHISELAMAR..los dientes
La señora, a la que yo ya veía con rulos y en bata, empieza a mofarse:
-ay calamidad..ay calamidad, que sería sin mí..calamidad
De pronto uno de los sucesos más extraños de los que he sido testigo se produjo dentro del retrovisor, la mujer sacó de una bolsa una dentadura-espero que postiza-y se la dio al pobre hombre con otro "calamidad" de propina.
El hombre se la incrustó, plegó sus párpados y se salió del espejo durante el resto del trayecto.
La mujer intentó hablarme del tiempo, de las RETONDAS, y del euro, que me perdone pero no la hice ni caso.



Ruego a las usuarias, suban al taxi, con las piezas de sus muñecos ya montadas, por favor.
Ruego a los usuarios, suban al taxi, ya humillados de casa, sin favor.